Las coletas son el peinado preferido de muchas personas, ya que ofrecen comodidad y estilo. Sin embargo, el uso frecuente de gomas para el pelo puede provocar daños, roturas y molestias si no se hace con cuidado. Saber cómo proteger el cabello mientras disfrutas de los beneficios de una coleta es esencial para mantenerlo sano.
Los riesgos del uso diario de la coleta
Utilizar gomas de pelo para sujetar una coleta todos los días puede provocar varios problemas. La tensión creada por las gomas de pelo apretadas puede hacer que el pelo se rompa, especialmente en zonas delicadas como las sienes y la nuca. Esto es especialmente cierto para las personas con cabello fino o quebradizo, que pueden sufrir más daños. Además, si el pelo se recoge constantemente en el mismo sitio, puede provocar «alopecia por tracción», una forma de caída del cabello causada por la tensión constante sobre los folículos pilosos.
Otro problema común asociado a las coletas es el debilitamiento del cabello y las puntas abiertas. Atarse el pelo repetidamente puede debilitar las hebras y contribuir a una falta general de salud. También es esencial que tengas en cuenta cómo te quitas el coletero; arrancarlo de un tirón puede provocar más roturas.
Consejos para una coleta sana
Para disfrutar de la comodidad de las coletas sin sufrir, ten en cuenta estos consejos:
Elige el coletero adecuado
Opta por gomas más suaves y flexibles, como los coleteros de seda o las gomas en espiral. Estas alternativas son más suaves con el pelo y ayudan a minimizar las roturas.
Cambia de peinado
Evita hacerte una coleta en la misma posición todos los días. Alterna la altura y la colocación de la coleta para evitar la tensión en los mismos mechones.
Relájate
Mantén la coleta apretada, pero no demasiado. Una sujeción más suelta reducirá la tensión sobre el cabello y el cuero cabelludo, minimizando el riesgo de rotura e incomodidad.
Dale un respiro a tu pelo
Deja que tu pelo descanse llevándolo suelto siempre que sea posible. De este modo, tus mechones se recuperarán de la tensión provocada por las ataduras.
No te pases durante la depilación
Cuando te quites la goma del pelo, hazlo con cuidado. Evita los tirones, que pueden hacer que las mechas se rompan. En su lugar, desliza suavemente la goma para minimizar los daños.